En la Muralla China

Me desperte temprano, a las 8:30 salia el tour a la Muralla China. No lo podia creer… El Lobo en la Muralla China. La cuestion es que el puerto esta a doscientos kilómetros de la muralla, y son como tres horas de viaje. El tour era solo para personal, con lo que el clima era mas festivo que de costumbre. Eramos dos micros. Yo habia sacado mi pasaje solo, sin comentarlo demasiado, y sabia que de mis amigos ninguno iba a poder ir. Fernando (el novio de Paula) ya lo habia hecho, Fernando, mi companero de cabina recien llego y no logro conseguir pasaje. De los de los resturantes era muy difícil por que tiene pocos dias libres… asi que para variar, estaba a la buena de Dios.
Los ultimos dos dias me habia pasado poniendole musica al reproductor para llevarla. Dicho sea de paso, como estos dias estuve laburando en el Night Club, me hice amigo del DJ y me paso una base de 18000 canciones… Madre, no te emociones, no hay nada latino. Asi que estuve seleccionando lo que llevaba. Debo decir que el parlantito que me compre la ultima vez que estuve en Singapur ya esta amortizado. Obviamente que no lo use en el micro, pero una vez que llegamos a la Muralla fue la sensación del tour.El viaje a Muralla fue muy interesante y pintoresco, pero medio deprimente. Por un lado, aunque estaba con Ariel, me sentia solo, por el otro lado me lleve una impresión de la China Comunista que no me gusto demasiado. Los edificios viejos ni los demuelen ni los reciclan ni los reutilizan, los dejan como estan, juntando tierra y basura. Toda la zona del puerto de Xingang es asi, de edificios maltrechos, negocios sucios y gente desarrapada. Cuando llegamos a la autopista, que debo decir, es amplia, muy amplia, la cosa se puso diferente, o lo parecia. A los 80 km paramos en una estacion de servicio, grandisima, con un servicentro gigante, una hermosa escultura en la entrada. Cuando entramos a los banos, hedian, cuando entramos al negocio, todo tenia polvo, y la mitad de las estanterías estaban vacias, y el local estaba dividido a la mitad por una cortina, detrás de la cortina se dejaba entrever utensillos de cocina, ropa apilada y una cama, como si la dependienta viviera ahí. Y estamos hablando de una autopista de cuatro carriles por lado. En la otra banquina, si dije que esta estacion de servicio era inmensa, habia una exactamente igual, en espejo…
Seguimos en el micro alejandonos de la ciudad y adentrandonos en el campo… una zona de sierras, nos llevaron a una ciudad donde en un hotel ibamos a almorzar. La ciudad tenia calles amplias, una sucursal impresionante del omnipresente Bank of China, otra un poco mas modesta del Rural Bank of China, algunos negocios y en una esquina estrategica, el hotel… desde afuera no tenia nada que envidiarle a ningun hotel de cuatro estrellas de mundo… y la primera mirada descuidada, lo confirmaba. Lo primero que me llamo la atención fue que en el primer piso, a la entrada del restaurant decia literalmente, en chino e ingles “Restaurant Chino” lo cual me resulto desconcertante… si estas en China, ¿por que ponen que el restaurant es “Chino”?... ¿¿O acaso en “El Bagual” dice Restaurante Argentino?? Y convengamos no conozco ningun restaurante mas ARGENTINO que “El Bagual” en Las Heras, Provincia de Buenos Aires, Republica Argentina… ni a ningun dueno de restaurante mas “Argentino” que Enrique, (y seria divertida una competencia de “Argentinidad” entre el Gaucho Enrique y el Gaucho Miguel Acuna, de Mariano Acosta…
Pero volviendo a la China, su restaurante, su hotel, su comunismo y su Muralla… en el restaurante, que tenia esas mesas redondas con el centro giratorio tan divertido nos fueron poniendo los platos en el centro. Lo divertido era que el servicio de mesa era el tradicional, con palitos, tazon y platito… sin cubiertos… y el centro de mesa era giratorio, con lo que nos divertimos bastante… el detalle, lo cual para mi no era problema, pero para mis companeros de mesa; y enumero: Ariel, de Chile, Natasha y los musicos de la Deep Blue, de Trinidad y Tobago; Sam, Security Supervisor, de Canada y algunos mas, talvez no tan civilizados o cosmopolitas… no le resultaba nada facil comer con palitos… y menos poder digerir los sabores… el unico mas o menos ubicado en esta mesa era un filipino (etnia omnipresente) que comia con gusto, ganas y deleite.
Los banos del hotel hedian igual que los de la estacion de servicio… y cuando nos llevaron al estacionamiento, donde habian puesto los micros después que nos bajamos, todos los rincones estaban sucion y llenos de basura… algo asi como una construccion de Primera con una administración de Cuarta… algo que se iba a repetir en el resto de mis impresiones… (Resumen: bien diagramada, mal administrado) salimos del hotel y seguimos nuestro canimo a la Muralla, por mas caminos de montana y pueblos pequenos, pero bien clarificantes para la verdadera perspectiva. Pasamos por todas las posibles instituciones de administración posibles: edificios del Partido, escuelas, complejos habitacionales, campos, Municipalidades, bancos, hoteles, negocios “particulares”, la sensación que me dio es que todo era CUADRADO… algo asi como el poema de Alfonsina Storni, “Cuadrados y Angulos”
Una de las cosas que me habian dicho de a Muralla era que estaba llena de vendedores de souvenires y turistas que, en cierta forma, “ensuciaban” la experiencia, pero como nos encontrabamos al final de la temporada (digamos que hacia un frio chino) no habia mas turistas que nosotros, y unos pocos, y hasta pintorescos vendedores ambulantes… con lo cual nuestra experiencia en la muralla fue mas vivida y “limpia” que lo que me esperaba según los comentarios de mis companeros.
Teniamos unas dos horas para estar en el lugar, y sabiamos que no era demasiado, pero tratamos de hacerlo valer. La sensación de estar en ese lugar es increíble. No me voy a poner a relatar las implicancias historicas de esta pared, unica construccion humana que se ve desde la Luna, y de la que se dice que cada bloque de piedra que la construye costo una vida humana. Mierda, si yo hubiese sido chino, hace 5000 anos, hubiera sido uno de los millones que murio para construirlas… si tuviera la creencia de mi Madre, talvez fui uno de ellos, que después de unas cuantas reenacarnaciones me encuentro aca, visitando mi Piedra…